Burg es una pequeña aldea localidad en la zona boscosa de Spreewald, cerca de la frontera entre Alemania y Polonia. Spreewald fue declarada por la UNESCO reserva de la biosfera por sus bosques y sus canales. Pero el gran tesoro de Spreewald está oculto a 1350 metros bajo tierra: un manantial subterráneo de aguas minero-medicinales con una concentración de sales minerales equivalente a las del Mar Muerto.
En 2005 la aldea de Burg recibió la denominación de «kurort»: destino de spa certificado. En la actualidad, la aldea entera de Burg es como un inmenso spa. Numerosos inversores han puesto allí sus ojos y sus carteras, inaugurando complejos hoteleros y spas para todos los gustos.
Está el Spreedwaldtherme, con 9 piscinas termales a entre 17 y 37 grados, cuyos tratamientos incluyen infusiones de vapor hechas con hierbas locales o masajes con aceite de linaza ecológico cultivado en sus bosques. O el inmeso Zur Bleiche, con 90 habitaciones, un spa de 4.000 metros cuadrados y un restaurante galardonado con estrellas Michelín.
Si eres un amante de la cultura spa, Burg es el paraíso que no puedes dejar de visitar.