Unas cinco millones de personas han visitado la Expo durante sus tres meses de actividades.
Se acabó. La Expo Zaragoza 2008 finalizó este domingo tras 93 días de conferencias, espectáculos y debates sobre el agua y desarrollo sostenible.
Según sus organizadores, la Expo ha sido un éxito: unas cinco millones de personas la visitaron y más de 2.000 expertos pasaron por el recinto de 25 hectáreas.
Las miles de conferencias, exposiciones y charlas quedarán materializadas en la denominada Carta de Zaragoza donde aparecerán sintetizadas las conclusiones alcanzadas.
Sin embargo, un alto responsable de la Expo afirmó bajo condición de anonimato que el evento va a hacer poco para resolver el problema del agua y que fue ideado sobre todo para revitalizar Zaragoza urbanísticamente.
«Son los mismo expertos que se reúnen en otros eventos y acaban concluyendo lo mismo, todo este dinero debería dedicarse realmente a resolver los problemas graves de agua y canalizaciones que hay», afirmó.
Shangai
Algunos expertos advierten que se cometería así el mismo error del Forum Universal de las Culturas de Barcelona celebrado hace cuatro años y del que casi no se recuerda nada.
Según Naciones Unidas, actualmente unas 1.100 millones de personas carecen de acceso a agua potable y 2.600 millones no tienen saneamiento, una situación que está prevista que vaya a empeorar en parte por culpa del calentamiento global y la falta de medidas contundentes para atajar esta crisis.
Pero esta problemática ya quedará lejos de Zaragoza y su recinto de la Expo que se convertirá en un parque empresarial donde, eso sí, se prevé incluir un centro de investigación sobre el calentamiento climático.
Algunos de los edificios emblemáticos como la Torre del Agua, de Enrique de Teresa, y el Pabellón Puente, de la iraquí Zaha Hadid, quedarán como museos.
La próxima cita será en 2010 en Shangai, China, donde la Exposición Universal, al contrario de la de Zaragoza, tendrá una temática más genérica.