Unidos por un precioso camino y rodeados por 80.000 m2 de arboledas y jardines en medio de un espectacular paisaje rocoso a unos 800 metros de altitud, se encuentran los hoteles balneario Sicilia y Serón, que forman la Estación Termal de Jaraba. Sobre los orígenes de estos baños se ha encontrado un documento donde se cuenta: «Salieron los romanos de Bilbilis (Calatayud) en una de las frecuentes excursiones por el contorno de la ciudad, y en una mañana fría de invierno llegaron al Xaral sorprendiéndoles el fenómeno de que, cada tanto y entre los zarzales y malezas, flotaban a raíz de la tierra, espesas nubecillas de humo. Para comprobar el fenómeno se acercaron a los sitios donde brotaban dichas nubecillas, y vieron, que lo que creían humo, no era otra cosa que el vapor desprendido por las aguas termales, las cuales les sirvieron para calentarse las manos ateridas de frío, por cuyo efecto prodigioso llamaron a los manantiales de aguas calientes del Xaral las Aguas de las Ninfas…».
Esas aguas siguen teniendo propiedades mágicas y se pueden aprovechar en unas instalaciones continuamente renovadas que desde el año pasado se completan con una enorme piscina termal y un innovador espacio donde respirar un ambiente saturado de sal indicado para afecciones respiratorias. En el entorno se pueden hacer numerosas excursiones desde el pueblo mudéjar de Cetina, coronado por un castillo palacio renacentista al Monasterio de Piedra.