Seguro que la palabra la has escuchado bastantes veces, y seguro que también sabes que está asociada a los spas, balnearios y terapias en las que está involucrada el agua. Pero, ¿sabes exactamente qué es la talasoterapia?
La palabra proviene del griego thalassos, que significa mar. El agua de mar es la base de esta terapia. Para tratarse de talasoterapia, debe realizarse en piscinas de agua de mar a 37 grados, lo más semejante posible a la temperatura corporal. El centro debe concentrar tres elementos: agua salina del mar, aire marino y clima de vertiente marina. Es la combinación de estos elementos lo que confiere su saludable eficacia a la talasoterapia.
El agua de mar contiene oligoelementos que no se encuentran en agua dulce, como sodio, potasio, yodo o cinc entre otros. Esto hace que los tratamientos de talasoterapia sean eficaces para mejorar problemas circulatorios, respiratorios, musculares, de las articulaciones e incluso del metabolismo. Y además son relajantes y muy placenteros. ¡Al agua se ha dicho!