Algunos productos de limpieza utilizados en el baño son muy tóxicos y peligrosos para nuestra salud. De hecho, la sosa cáustica, muy utilizada para desatascar tuberías y baños, es muy contaminante. La soda cáustica no se considera un contaminante, se separa en componentes relativamente inofensivos, una vez liberados en el agua o suelo húmedo. Pero es un irritante que puede quemar la piel, irritar la nariz, la garganta y las vías respiratorias, por lo que el contacto con los que debe evitarse al máximo.
De una manera sencilla podemos evitar atascos y llamadas al fontanero. Tan simple como este proceso. Una vez a la semana, verter 2 tazas de agua hirviendo mezclada con bicarbonato de sodio, por el desagüe. Esperar unos minutos y poner la otra taza de bicarbonato de sodio en el desagüe, para luego añadir una taza de vinagre y tapar el desagüe. Dejar que actúe y echar un poco más de agua hirviendo. De esta manera, conseguiremos unas tuberías en buen estado y sin contaminar.
