Desde 2007, la industria del mueble no mostraba tasas positivas. Han sido distintos informes, como el realizado por el Observatorio del Mueble (OM), los que han rebelado una situación de mejoría en este sector.
Tras unos años muy buenos, llegaron las vacas flacas para el mueble de baño y pese a todo, ha conseguido ser uno de los pocos subsectores que ha conseguido alzarse ligeramente tras años tan debastadores como el 2009 o el 2011.
Solamente aquellas compañías que apostaron por la exportación, han conseguido compensar el mercado nacional. Las causas de mejora en la actividad se basan en estas exportaciones y en la recuperación de la demanda interna. En concreto, se habla de un 8,6% de crecimiento en las ventas del sector del mueble de baño.
Las empresas españolas no se han centrado solo en ofrecer un mueble de calidad y diseño a precio competitivo, sino que además han buscado nuevos nichos de mercado en el ámbito internacional, como los baños de uso público o el equipamiento para hoteles, cruceros y otros espacios de ocio.
También han aumentado sus catálogos, buscando satisfacer a todo tipo de consumidor, desde personas jóvenes hasta ancianos.
Los expertos señalan que durante este 2015 los esfuerzos realizados por las empresas de este sector, se pueden ver recompensados, convirtiendose así en los primeros en notar el cambio de ciclo.