La mejor forma de empezar es con papel y lápiz. Hay que medir todo con atención para hacer un esbozo de la cocina. Con esto ya puedes hacerte una idea de las posibilidades y limitaciones determinadas por la forma de la habitación y el espacio en las paredes. Para todo esto, habrá que realizar dos esbozos diferentes.
ESBOZO 1: La habitación.
Haz un dibujo de la habitación. Mide altura al techo y la distancia entre paredes. Marca en el esbozo la posición actual de todos los componentes arquitectónicos como puertas, ventanas, electricidad…
ESBOZO 2: Las paredes.
Haz un plano de las paredes. Mide la altura y el ancho de las paredes en las que pienses instalar armarios. No te olvides de anotar el espacio que puerta y ventana necesitan para abrir y cerrar. Si piensas en instalar un armario bajo una ventana, recuerda que el espacio mínimo entre el marco de la ventana y el suelo debe ser como mínimo de 90 cm (105 de preferencia). Anota la posición de todos los elementos en las paredes.