Transformar un baño no siempre significa empezar desde cero. A veces, se trata de hacer los cambios justos, pero bien pensados, para que el espacio se vuelva más cómodo, moderno y funcional. Esta es la historia de un cambio de bañera por plato de ducha real que llevamos a cabo en la Sierra de Madrid, donde nuestros clientes querían renovar su baño sin perder su esencia y aprovechando los elementos en buen estado.
Una reforma con objetivos claros: funcionalidad, calidez y sencillez
Nuestros clientes, una familia de la Sierra de Madrid, nos contactaron porque querían darle un aire renovado a su baño. No se trataba de una obra por puro capricho estético: el objetivo era mejorar la funcionalidad del baño, hacer que todo fuera más cómodo y moderno, y de paso, aprovechar para hacer algunos ajustes que llevaban tiempo queriendo hacer.
La idea era clara: realizar una reforma bien pensada, sin excesos, pero que transformara por completo el ambiente del baño.
Cambio de bañera por plato de ducha: comodidad y seguridad ante todo


Uno de los primeros pasos fue eliminar la bañera e instalar un plato de ducha antideslizante. El modelo elegido fue nuestro StoneBath, un plato de ducha de carga mineral con textura de pizarra natural. La estética enamoró a nuestros clientes, pero lo que más les convenció fue su seguridad: gracias a nuestra tecnología exclusiva PGS antideslizante, el plato ofrece un agarre superior incluso con los pies mojados.
Este cambio, además de hacer el baño más seguro, liberó mucho espacio útil, dando al conjunto un aspecto más despejado y actual.

Descubre aquí más sobre el plato de ducha StoneBath.
Una ducha a medida: paredes con personalidad y mampara casi invisible
Con la nueva ducha ya en marcha, tocaba pensar en cómo proteger el resto del baño de las salpicaduras sin romper el diseño. La solución: una mampara fija de cristal templado de 120 cm de ancho por 195 cm de alto. Transparente, sin perfilería innecesaria, y con tratamiento antical, esta mampara pasa completamente desapercibida, permitiendo que el protagonismo visual se lo lleven las paredes de la ducha: tres paños revestidos con un porcelánico que imita teselas de piedra natural, creando un juego de texturas muy elegante.
Eso sí, antes de instalar una mampara fija de este tamaño, en SecuriBath siempre enviamos a un técnico para comprobar que su transporte e instalación son viables. Es importante tener en cuenta aspectos como huecos de escalera, ascensores pequeños o radios de giro reducidos. Nada se deja al azar.
Subimos tomas de agua y actualizamos el alicatado de la zona de ducha
Uno de los trabajos más técnicos de esta reforma fue subir las tomas de agua fría y caliente de la antigua bañera para adaptarlas a la nueva ducha. Además, se renovó todo el alicatado de esa zona, asegurando una integración perfecta con el nuevo estilo del baño.
Este tipo de detalles técnicos suelen pasar desapercibidos cuando todo está terminado, pero son claves para que una reforma sea duradera y estéticamente impecable.
Un nuevo suelo: más cálido, más limpio visualmente
Otro de los cambios importantes fue sustituir el suelo del baño. Se eligió un pavimento porcelánico con acabado cálido, fácil de mantener y capaz de disimular pequeñas manchas, gotas de agua, pelos o el uso diario. Una decisión tan práctica como estética, que ayudó a mejorar notablemente la sensación de confort del baño.
Adiós al radiador eléctrico, hola al toallero conectado al sistema de calefacción


Hasta ahora, el baño contaba con dos sistemas de calefacción: un radiador de elementos conectado a la instalación de agua y un pequeño radiador eléctrico que apenas se usaba. Aprovechando la reforma, nuestros clientes decidieron sustituir el radiador clásico por un radiador toallero más estilizado y conectado a la calefacción de la casa. Resultado: un elemento funcional, decorativo y más eficiente.
También se eliminó el bidé: más espacio, más comodidad
En este caso, nuestros clientes también querían eliminar el bidé, un sanitario cada vez menos utilizado. Nos encargamos de anular las tomas y el desagüe y de revestir la zona con el mismo material del resto del baño, de modo que no quedó ni rastro de su existencia. Más espacio, mayor libertad de movimiento y una estética más limpia.
Reutilizar elementos en buen estado: una apuesta responsable y eficiente
En SecuriBath no creemos en desechar todo por sistema. Siempre que sea posible, y si el cliente lo desea, apostamos por aprovechar elementos en buen estado para reducir costes y darles una segunda vida. Eso sí, avisamos siempre de que existe un pequeño riesgo durante su manipulación, y que puede haber defectos ocultos que no se detectan a simple vista. Si por cualquier motivo no es viable reutilizarlos, ofrecemos siempre opciones similares adaptadas al estilo y presupuesto del cliente.
En esta reforma conseguimos reinstalar con éxito los dos lavabos existentes, el inodoro y el conjunto de grifería de la ducha. Un ahorro importante y un bonito gesto con el planeta.
Una reforma completa, sin renunciar a lo esencial


Esta historia demuestra que una reforma no tiene por qué ser complicada ni empezar desde cero. Basta con tener claros los objetivos, cuidar cada detalle y contar con un equipo que trabaje con profesionalidad y respeto por lo que ya existe.
En este caso, nuestros clientes consiguieron un baño más moderno, cálido y funcional, sin renunciar a los elementos que les gustaban y con la seguridad de haber tomado buenas decisiones.
¿Estás pensando en cambiar tu bañera por un plato de ducha?
En SecuriBath te asesoramos desde el primer momento para que tu reforma sea un éxito. Ya sea un cambio de bañera por plato de ducha, una reforma integral o una pequeña mejora, nuestro equipo está listo para ayudarte a transformar tu baño en un espacio más práctico, seguro y bonito.