En SecuriBath, cada reforma es una historia real, y esta tiene como escenario el corazón de Madrid, concretamente la calle Ibiza. Nuestros clientes nos contactaron buscando una solución práctica para su ducha, segura y sin necesidad de hacer grandes obras. Ya habían reformado el baño hace poco tiempo, pero tras convivir con los resultados, notaron que ciertas decisiones no se adaptaban del todo a sus necesidades reales, especialmente en materia de accesibilidad y seguridad.

Este proyecto es el ejemplo perfecto de cómo con pequeñas intervenciones y una buena planificación se puede transformar un baño reciente en un espacio funcional, seguro y pensado para el bienestar diario. Si estás pensando en realizar mejoras de accesibilidad sin meterte en una reforma integral, esta historia te interesa.

Un caso real en la calle Ibiza: la reforma después de la reforma

Nuestros clientes llegaron a nosotros por recomendación de un familiar que había trabajado con SecuriBath años atrás y quedó muy satisfecho. Esta confianza previa fue clave para que nos encargaran esta segunda intervención en un baño que, aunque era nuevo, no resultaba del todo cómodo para su usuaria habitual.

La prioridad era clara: hacer el baño más accesible sin desmontar todo lo que ya estaba hecho. El reto era intervenir de forma quirúrgica, manteniendo lo que funcionaba y cambiando lo que realmente limitaba el uso diario.

Un plato de ducha supuestamente antideslizante… que resbalaba

Plato de ducha que resbala antes de la reforma

El primer problema que encontramos fue el plato de ducha original. A pesar de que en teoría era antideslizante, en la práctica no ofrecía la seguridad necesaria. La usuaria había tenido que colocar bandas adhesivas para evitar resbalones, lo que además de incómodo, no era una solución definitiva ni estética.

La propuesta de SecuriBath fue clara: sustituirlo por nuestro plato de ducha antideslizante modelo MAGMA, que además de ofrecer una superficie segura gracias a la tecnología exclusiva PGS (Power Grip System), permitía reubicar el desagüe más alejado de la zona de paso, reduciendo aún más el riesgo de accidentes al entrar o salir de la ducha.

El plato MAGMA es resistente, cálido al tacto, y está diseñado para ofrecer seguridad sin sacrificar el diseño. Ideal para reformas donde la accesibilidad es prioridad.

Mampara asistencial a medida: la clave para un acceso cómodo y seguro

Otro de los grandes problemas del baño era el acceso a la ducha. La mampara inicial, aunque visualmente atractiva, bloqueaba el paso más amplio y dificultaba la entrada, sobre todo si algún día era necesario recibir ayuda desde fuera.

En su lugar, instalamos una mampara asistencial a medida, diseñada específicamente para personas con movilidad reducida. Este tipo de mamparas tienen varias ventajas:

  • Se puede fabricar en piezas de distintas medidas para adaptarse al espacio exacto.
  • Permiten una apertura más amplia.
  • Se pueden dividir en mitades, facilitando la asistencia desde fuera sin mojar el exterior.
Las mamparas asistenciales no son solo una opción para personas mayores o con limitaciones, sino una inversión inteligente en seguridad y practicidad a largo plazo.

Inodoro compacto y de altura Comfort: más espacio y más accesibilidad

El antiguo inodoro era grande, con una tapa multifunción tipo Multiclean que no resultaba útil para nuestra cliente. Por eso lo sustituimos por un modelo más compacto y con altura Comfort, lo que facilita las transferencias y mejora la ergonomía, algo esencial para cualquier usuario con movilidad reducida o dificultades para sentarse o incorporarse.

Este cambio no solo mejora la accesibilidad, sino que también deja más espacio libre en el baño, algo muy valorado especialmente en viviendas urbanas donde cada centímetro cuenta.

Barras de apoyo homologadas y estables: detalles que marcan la diferencia

Tanto en la zona de ducha como junto al inodoro, se cambiaron las antiguas barras de apoyo por modelos homologados, especialmente pensados para ofrecer mayor firmeza y durabilidad.

En el caso de la zona del inodoro, la barra abatible se instaló con un sistema de fijación reforzado que reduce el movimiento lateral (el clásico «temblor» cuando nos apoyamos con fuerza). Este tipo de mejoras ofrecen una sensación real de seguridad y confianza al usarlas.

Reformar sin desmontarlo todo: una filosofía responsable

Uno de los pilares de esta intervención fue aprovechar todo lo que estaba en buen estado, evitando así generar residuos innecesarios y reduciendo el coste final para nuestros clientes.

En esta obra:

  • Se mantuvieron los revestimientos generales del baño.
  • Se trabajó sobre el plato antiguo desmontándolo con cuidado.
  • La intervención se centró en tres puntos clave: ducha, inodoro y barras de apoyo.

Gracias a nuestro equipo técnico y al trabajo coordinado de los instaladores, fue posible realizar estos cambios sin afectar el resto del baño, manteniendo su estética y acabados originales.

Una reforma pequeña, con un impacto enorme

El resultado final fue un baño mucho más funcional, cómodo y seguro, especialmente pensado para el día a día de nuestra clienta. Todo ello sin necesidad de hacer una reforma integral, ni romper con el estilo que ya tenía el baño.

Cambiar el plato por uno verdaderamente antideslizante, instalar una mampara asistencial a medida, sustituir el inodoro por uno más cómodo y renovar las barras de agarre fueron decisiones que, aunque parezcan simples, marcan un antes y un después.

En SecuriBath creemos que las reformas no tienen que ser grandes para ser transformadoras.

¿Tienes un baño nuevo que no termina de ser cómodo?

Es más común de lo que parece. A veces, tras una reforma reciente, nos damos cuenta de que hay decisiones que no fueron tan acertadas. O simplemente nuestras necesidades cambian, y toca adaptar el espacio.

Si te encuentras en esa situación, habla con nosotros. En SecuriBath te asesoramos de forma personalizada, valoramos lo que se puede aprovechar, lo que conviene mejorar, y siempre buscamos la solución más práctica con la menor obra posible.

Porque la accesibilidad y la comodidad no deberían esperar a una gran reforma.
A veces, un pequeño cambio es el verdadero paso hacia una vida más cómoda y segura.