El documental muestra cómo durante año una familia ejerce un impacto cero sobre la naturaleza, renunciando a cualquier comodidad cotidiana que repercutiese negativamente en el medioambiente.
Volver a usar la bañera como lavadora puede parecer una medida drástica, y es sólo un ejemplo de lo que se puede hacer para salvar el planeta.
Nada de televisión, ni electricidad, ni frigorífico. Uno de los protagonistas fabricó la pasta de dientes y el champú con bicarbonato, que también sirve para lavarse los dientes.
Del baño desaparecieron los cosméticos y hasta el papel higiénico. Además del beneficio ecológico, sus gastos se recortaron un 50%.
Ir a todas partes en bicicleta y cambiar el botón noveno del ascensor por las escaleras mejoró su forma física. Puede que ahora vean también los beneficios del libro y la película que su experiencia ha generado.