Los meteorólogos auguran lluvias para las próximas semanas, lo cual es una gran noticia, pero la sequía está a la vuelta de la esquina. El agua es como la salud, solo nos damos cuenta de su importancia cuando falta. Se ha hablado mucho estos días de la escasez de lluvia y esta semana queremos hacer un espacial hincapié en este tema, ya que mañana es el Día Mundial del Agua.

Es cierto que la sequía, como problema regional o nacional, obliga a proporcionar soluciones y políticas que deben ser planteadas desde esferas más altas, pero también se puede aportar un grano de arena a título personal y como ciudadano.

Sequía

En la actualidad la factura del agua no es una de las que preocupan en la economía familiar, como por ejemplo la de la luz.  Por eso, la gente no es tan cuidadosa con su consumo y sobre todo a la hora de invertir en dispositivos y mecanismos que ahorren agua, pero la realidad es que las nuevas tecnologías, grifos con sensores, reductores de caudal y los distintos dispositivos de control del consumo, permiten ahorrar hasta un 50% en el consumo de agua.

 

Grifos inteligentes

Una de las soluciones más eficientes es la de instalar grifos inteligentes, que permiten ahorrar hasta un 25% más de agua que si se utiliza uno monomando. Si se tiene en cuenta que el consumo de agua por habitante al día es de 171 litros, el simple goteo de un grifo del lavabo supone una pérdida de 100 litros al mes de agua.

La grifería inteligente regula, además del caudal, la temperatura del agua, con lo que también se ahorra energía. El mercado proporciona multitud de diseños de vanguardia que permiten ahorrar el consumo de agua y poner nuestro grano de arena en preservar esta fuente de vida.