Esta Casa en Tenerife es una de las maravillas que conjuga su belleza con el agua. Agua que sirve de marco incomparable ara enmarcar la belleza de la edificación, y agua como la que se refleja en su piscina, la cual sirve de nexo de unión con el horizonte y con el Teide. La obra, de los arquitectos Corona y P.Amaral es una emocionante combianción de hormigón y vidrio, y está construida unos 300 metros por encima de el nivel del mar.
La entrada se inicia desde un nivel superior hasta el salón de doble altura desde una escalera de hormigón. El minimalista interior se convierte en una segunda naturaleza y el agua del océano que divisamos enfrente es el decorado de fondo. Una vez en la habitación principal, una bañera de obra, hecha tambien en hormigón y a los pies de la cama, nos da la bienvenida. Es esta una construcción que tanto por su respeto al entorno, su belleza y sus soluciones consigue ese algo tan difícil como es el conjugar a la perfección naturaleza y arquitectura. Via
