¿Eres de los que te gusta darte una ducha para sentirte limpio y reluciente? Pues bien, para incidir sobre todo en el segundo aspecto llega Sylvania Ecolight, un dispositivo que puede acoplarse a cualquier estándar de alcachofa y sirve, básicamente, para arrojar luz a esos momentos de higiene, más o menos frecuentes dependiendo del sujeto. Dispone de dos LEDs: una especie de foco que se alimenta del propio agua para funcionar y un anillo termómetro que se pone azul cuando la temperatura del líquido elemento baja de los 25,5 grados y rojo cuando supera los 41. Por 31 euros hasta Norman Bates se quedaría deslumbrado por el cacharro.