Son bien conocidas las ventajas del agua de mar; un terapéutico paseo al borde del mar oxigena nuestros pulmones y nos permite absorber el beneficioso yodo. Bañarnos en el mar, además de placentero y refrescante, activa nuestra circulación.
Pero el agua de mar es mucho más rica de lo que pensamos, auténtico oro líquido. No debemos olvidar que del agua marina surgió la primera célula de vida; de hecho, la biología es llamada la ciencia del agua, tan ligada está el agua de mar al desarrollo de la vida en nuestro planeta. Además, es el mayor disolvente natural que hay en la Tierra. Hasta 72 horas después de recolectarla, el agua de mar tiene un potente efecto antibiótico y bactericida. Y por añadidura, el agua marina es un nutriente natural, ya que contiene los mismos minerales que habitan en nuestro medio interno, permitiendo reequilibrar la carencia de alguno de ellos en nuestro organismo. Disponemos de un verdadero tesoro natural totalmente gratuito y al alcance de todos. ¡Después de saberlo, disfrutarás el doble de tu próximo baño en el mar!