Los flotadores no siempre flotan y en muchas ocasiones pueden resultar peligrosos para el bañista. Chalecos hinchables, flotadores, manguitos… la mitad de todos estos artículos de baño presentan alguna irregularidad.
Consumo ha analizado una veintena de ellos. Algunos solamente tienen problemas en el etiquetado pero otros son peligrosos para los niños pues podrían ahogarse.
Un ejemplo de esto son las válvulas de los flotadores y colchonetas que pueden llegar a desprenderse del artículo y ser suceptibles de llevarlas a la boca por los más pequeños.
Por todo ello se recomienda a los padres no fijarse sólo en el precio sino leer bien el etiquetado y las advertencias que se encuentran en los envoltorios.