Las duchas han cambiado, y ahora se denominan columnas de hidromasaje. Este tipo de duchas mejora la calidad de vida de quienes las usan ya que relajan el cuerpo y la mente tras un duro día de trabajo. Las cabinas de hidromasaje incluyen planto de ducha, mampara y columna de hidromasaje. Su precio varía dependiendo de las prestaciones de la columna, como si es manual o eléctrica o por el número de jets y de las funciones de sauna o aromaterapia que puede incluir.
Las más sencillas pueden costar unos 1.600 euros, pero las que incluyen sauna, grifería termostática, asiento y jets, pueden llegar a los 2.400 euros, ambas sin instalación. Además, gracias a los nuevos grifos puedes tener las funciones de una cabina de hidromasaje sin gastarte tanto dinero. Hay algunos que te ofrecen hasta tres tipos de chorro de agua. Otro tienen la opción de masajearte gracias a las esponjas adaptables a la alcachofa. Pueden llegar a tener hasta cinco chorros de agua.
Además, las nuevas duchas incorporan mamparas de última generación. Puedes encontrarlas de una sola hoja fija de cristal securizado de 10 milímetros con perfil de acero inoxidable. Otra opción son las puertas correderas, que pueden tener dos laterales fijos y dos puertas correderas en ángulo con los perfiles lacados. Aunque si tu problema es la falta de espacio, puedes encontrar mamparas de cristal con forma angular y con perfiles metálicos, ideales para los baños más pequeños.
Para estos espacios más pequeños están especialmente diseñados los platos de ducha de dimensiones reducidas. Resultan muy prácticas ya que aprovechan las esquinas del cuarto de baño, que normalmente se desperdician, para colocar la ducha.
En el mercado puedes encontrar platos de ducha angulares, que se fabrican en medidas estándar de 70, 80 y 90 centímetros de lado y con formas rectas o curvas. Están fabricados en distintos materiales como el acrílico, que cuestan alrededor de 99 euros el más barato, los de gres porcelánico que cuestan unos 75 euros, o los de metacrilato, que puedes encontrarlos a partir de 70 euros.
Puedes encontrar diversos modelos que se adapten a tus necesidades. Si pretendes que sean antideslizantes, tendrán un dibujo en la base. También encontrarás platos de ducha de líneas rectas, ideales porque se adaptan a la perfección a cualquier esquina del cuarto de baño.