Ahorrar agua, ahorrar agua: esa es nuestra obsesión. Y no todo va a ser cambiar la bañera por un plato de ducha, hay otras formas de ahorrar agua en el cuarto de baño. Por ejemplo este lavabo diseñado por Charlwood Design y finalista de los premios de diseño Reece Bathroom Innovation Awards.
Se trata de un lavabo absolutamente minimalista, de líneas curvas y limpias, totalmente en blanco, que por no tener no tiene ni grifo. Tan sólo un sensor que se activa con la presencia descargando un chorro de agua para su uso. De esta forma sólo se emplea la cantidad justa de agua.
El lavabo se llama Spout Faucet Basin y es perfecto, además, para obsesivos de los gérmenes que no desean «tocar» nada. Magia en tu baño.