Es un poco como los botones del iPod. Se trata de un lavabo minimalista, Spout, diseñado por el australiano Luca Abate. Por no tener, no tiene ni grifo, ni mando, ni nada. Tan sólo el seno del lavabo, en el que el usuario sitúa sus manos para que caiga agua por medio de un sensor de movimiento.
Y un pequeño botón circular estilo Apple, que se puede girar en una y otra dirección para seleccionar la temperatura del agua. Presionando el botón del centro de esa ruedecilla blanca, caerá un chorro constante de agua por si necesitamos llenar el lavabo para el afeitado, por ejemplo.
Ideal para los amantes del cuarto de baño tecnológico.