Realizar un cambio de bañera por ducha significa una mejora en seguridad y accesibilidad en nuestro cuarto de baño, pero tenemos que pararnos a pensar en el ahorro energético y en el ahorro de agua que también este cambio supone.

SecuriBath con su equipo de I+D se esfuerza constantemente para lograr mantener el máximo ahorro en nuestro hogar.

Cuando llenamos la bañera para darnos un baño, estamos gastando una media de 200 litros de agua. ¿Alguna vez nos hemos parado a pensar en esto? Con 200 litros de agua podemos llenar más de 600 vasos de agua, que suponen 100 días para la media que tenemos que tomar de 2 litros de agua diaria, más de tres meses gastados en un solo baño. Para pensárselo.

Por el contrario, con una grifería con limitador de caudal, una ducha de 10 minutos equivale a unos 60 litros de agua. Un 30% de lo que consumimos de agua al llenar la bañera. Es una labor de concienciación, evitar el gasto de agua es cosa de todos, para nuestro bienestar y para nuestro futuro.

Y más allá del gasto de agua, hay que contemplar el gasto de energía que supone llevar una bañera. Puesto que cuando nos damos un baño, éste suele ser con agua caliente, por lo que hay un consumo energético para este fin.

Si analizáramos el consumo de energía total de nuestra vivienda, el agua caliente se lleva del 20% al 40% del total de nuestro consumo energético, dependiendo de la instalación de nuestro hogar.

Pero en todos los casos hay un consumo energético, ya tengamos una caldera individual a gas, un termo eléctrico, o sea instalación comunitaria, por ejemplo con una caldera de gasóleo.

Este consumo energético es algo que nos pasa desapercibido al no tener conciencia real del gasto en euros que supone anualmente, pero hay que pararse a pensar en que instalar un plato de ducha en nuestro baño, con una grifería que tenga limitador de caudal, nos va a hacer ahorrar en nuestras facturas muchos euros y con un aporte de cada uno, mantener un planeta más limpio y sostenible.

Para conseguirlo, SecuriBath te ofrece la posibilidad de eliminar la bañera e instalar un plato de ducha antideslizante, para que todo lo escrito anteriormente no caiga en el olvido, y así día a día tener un ahorro energético y de agua que suponga también un ahorro para nuestra economía familiar.