En SecuriBath apreciamos la belleza de las pequeñas cosas algo que en la decoración de interiores puede marcar la diferencia.
El diseñador taiwanés Yen Jui-Lin es un artista experto en madera y de su minucioso y delicado trabajo nacen estas adorables criaturas que proyectan el alma poética de su creador y su respeto por la materia prima con la que trabaja. Además de su profesión como artista, también da clases a pequeños sobre ilustración, trabajo que le inspiró a crear una serie de famosas y tiernas figuras.
Estas 30 figuras cuentan con diferentes formas y detalles que las distinguen a unas de otras, cada una de ellas representa a una de sus alumnas. Las figuras además de tiernas presentan un experto trabajo de diseño por lo que se han vuelto famosas en todo el mundo.
En la ciudad de Taoyuan crece el árbol de alcanfor, Juí-Lin vive en el campo cercano a la ciudad y aprovecha la madera dorada de tonos rojizos y cálidos del árbol con la que ha hecho estas entrañables criaturas.
Antes de dar forma a la madera del alcanfor, a veces reciclada, el diseñador dibuja los bocetos con minucioso cuidado para no cometer ningún error y desperdiciar la madera que para él es un recurso tan preciado y a la que trata con respeto y devoción.
En el caso de este personaje en específico, el pedazo de madera que había escogido para realizarlo venía unido por lo que decidió mantenerlo así, simbolizando que hay cosas que el destino no quiere que sean separadas como pasa con los compañeros de vida.
Fuente: Domestika