Que raro resulta la reforma donde se coloque una bañera en vez de un plato de ducha, a no ser que en la vivienda dispongan de dos baños y uno disponga de bañera.
Ya se sabe pensamos en los hijos que cuando son pequeños parece que es más práctico una bañera que una ducha, por la cosa de que se puedan caer, a diferencia de poder sentarles en la bañera sin ningún peligro.
Ahora rizamos el rizo y los usuarios quieren duchas pero no las estandar, queremos duchas que cuanto más grandes mejor. No nos conformamos con duchas de 120×75 o superiores, nos atraé las duchas de obra, donde toda la base del suelo o una superficie amplia, es la ducha en si misma.
Esta información procede de un interesante blog, que recomendamos visitar Reformas, obras y construcción.