Beatrix Toebe es la joven diseñadora industrial autora de esta idea. Se trata de otra ducha que ayuda a ahorrar el agua por la vía de la reutilización.
El mecanismo es tan simple como un panel vertical móvil. Situado en posición completamente vertical, es una ducha. Al inclinarlo, el agua cae en una zona semicircular que la recoge y hace las veces de lavabo. Posteriormente este agua se puede utilizar para lavarse los dientes, por ejemplo.
Cambiando la bañera por un plato de ducha se ahorran hasta 150 litros de agua al día. Quizá no podamos tener acceso a diseños tan modernos, pero hay decisiones que sí están en nuestra mano. ¡Pásate a la ducha!