Increíblemente para muchos, está considerada la pieza más influyente del movimiento surrealista. Por más que se pueda observar, no deja de ser un urinario hecho de porcelana blanca, típico de un cuarto de baño de restaurante o algo semejante.
Esta «Fuente» causó muchísimo revuelo a principios del 1900 cuando el artista la envió a la exposición anual de arte en la galería Grand Central de NYC. Firmada con el seudónimo de «R. Mutt» fue rechazada de inmediato para concurso. Duchamp renunció a su posición de jurado como muestra de disconformidad ante tal hecho, algo que causó un shock en la sociedad artística de la época. Las palabras del autor ante tal reacción fueron:
«Si el Sr. Mutt construyó o no con sus propias manos la Fuente no tiene ninguna importancia. Él la eligió. Tomó un objeto de la vida diaria, lo reubicó de manera que se perdiera su sentido práctico, le dio un nuevo título y punto de vista y creó un nuevo significado para ese objeto»