Las mejores tuberías para la circulación de agua potable
A día de hoy, es difícil encontrarse con materiales como el aluminio, el plomo o el hierro galvanizado en las viviendas más actuales, sin embargo, no es tan difícil toparse con estos materiales en el sistema de tuberías de algunas viviendas que cuentan ya con más de 50 o 60 años de antigüedad. Para evitar cualquier tipo de confusiones al respecto, vamos a analizar que tipos de tuberías son las más adecuadas para el hogar y que tipo de problemas pueden llegar a afectar notablemente tanto a la vivienda como a la salud de las personas que residen en ella.
Actualmente, todas las tuberías de una instalación de agua potable para la vivienda, deben contar con sus correspondientes certificados UNE-ISO.La calidad de un buen sistema de tuberías para el agua potable viene determinada por el tipo de materiales con que se fabrican. Si ya no se fabrican tuberías de materiales como el plomo o el hierro, se debe principalmente a los problemas generados por la corrosión y a la gran cantidad de problemas para la salud pueden llegar a ocasionar. Por no hablar de la contaminación.
Por un lado, el plomo sigue presente en las tuberías de un gran número de viviendas antiguas construidas a finales de los años 70. Sus efectos negativos para la salud son más que conocidos, entre los que cabe destacar las alteraciones glandulares , el retraso en el desarrollo mental (altamente peligroso en niños) o la plumbosis. Pero puede pasar a palabras mayores, afectando gravemente al corazón, los riñones o al funcionamiento de los glóbulos rojos en la sangre. Por otro lado, el consumo de agua con partículas de hierro generadas por la corrosión de las tuberías, también puede dar lugar a serios problemas de salud si se superan los niveles normales de hierro en el organismo.
Aparte de este tipo de problemas, es frecuente que se produzcan humedades en la vivienda debido a la corrosión en las tuberías fabricadas con estos metales.
La vida media de un sistema de tuberías oscila entre los 15 y los 20 años de uso y es muy recomendable revisar las tuberías cada dos o tres años. Los materiales con que actualmente se construyen estos sistemas de tuberías para la vivienda van desde el cobre y el acero galvanizado, hasta el PVC y sus ‘hermanos’ los termoplásticos, mayoritarios junto al cobre en casi todas las instalaciones de agua potable actualmente en España. Estos materiales garantizan una utilización apta para el consumo humano y además están mejor preparados contra la corrosión, evitando fugas y humedades en la vivienda.