La Federación Internacional de Natación (FINA) desmintió hoy en un comunicado que existan «datos científicos» que relacionen el uso de los nuevos trajes de baño de la marca Speedo con una mejor actuación de los nadadores, y anunció que revisará los métodos de homologación de bañadores.
La polémica que rodea a los nuevos modelos de mallas de la marca, acusados de haber influido en los numerosos récords que se han obtenido en los últimos meses, recibió hoy una respuesta de la FINA, que destacó su labor como reguladora del proceso de aprobación de bañadores desde noviembre de 2005.
«La FINA está siempre dispuesta a examinar todo lo relacionado con la homologación de los trajes de baño. Sin embargo, por lo que sabemos, no hay ningún dato científico objetivo que permita establecer que las combinaciones Speedo LZR Racer, TYR Tracer Light o cualquier otra tenga una mejor flotabilidad», indicó.
La federación aprovechó el comunicado para recordar que, el próximo 12 de abril, con ocasión de los novenos Campeonatos del Mundo de 25 metros, se reunirá con los proveedores de equipamiento deportivo en Manchester, Inglaterra, con el objetivo de «estudiar y, si es necesario, actualizar los procedimientos y requerimientos para la homologación de trajes de baño».
La combinación de Speedo, hecha de un material que repele el agua, está en el punto de mira desde finales de marzo, cuando nadadores como el australiano Kieren Perkins, y técnicos como el director de la Federación Francesa de Natación, Claude Fauquet, denunciaron que dieciocho de los diecinueve nadadores que han batido récords del mundo desde el comienzo de la temporada llevaban el famoso bañador.