piscina-flotador.jpg

Se acerca el verano y se plantean algunas reformas en las áreas de exterior. Las piscinas y las zonas de juego infantiles deberán incorporar pavimentos seguros para que puedas estar en ellas sin riesgos ni peligros innecesarios.
Los resbalones y las caídas son los accidentes más frecuentes en las áreas de las piscinas y en los parques para niños. En ambos espacios, la elección de pavimentos que amortiguen los impactos ocasionados sobre los mismos, es el mejor camino para disfrutar de un verano tranquilo, sin sustos o incidentes desagradables.
Los mejores materiales para estas aplicaciones son los cauchos reciclados, procedentes de neumáticos reutilizados, triturados y seleccionados, a los que se añaden ligantes (componentes químicos) y pigmentos para colorear. Buena parte de los materiales desarrollados actualmente incorporan compuestos químicos en alguna fase de su producción, gracias a los cuales se mejora la calidad del producto final. Pavimentos y revestimientos, mobiliario y muchos de los artículos que usamos en el hogar se fabrican con componentes químicos, sin los cuales sería imposible su desarrollo.

ninospiscinaiv.jpg

Las losetas de caucho reciclado son perfectas para las zonas infantiles, como pavimento alrededor de las piscinas, en azoteas y patios, y para crear superficies seguras en el garaje, en el que progresivamente se desarrollan espacios de ocio para los más pequeños. Actualmente se comercializan en diferentes formatos, tamaños y colores para que puedas elegir la propuesta que mejor se adapte a tus necesidades estéticas.
Ventajas del suelo de goma
La principal ventaja de este suelo de goma es que se trata de una superficie segura, de forma que su función como amortiguador de impactos se convierte en uno de sus máximos valores. Además, las losetas de caucho reciclado son resistentes, duraderas, antideslizantes, permeables al agua (secan rápidamente), no inflamables y apenas necesitan mantenimiento. No presentan cambios de color por los efectos de la radiación solar ni se calientan en exceso, de forma que se puede caminar por ellas tranquilamente, incluso con temperaturas elevadas.
En las áreas de juegos infantiles este pavimento no tiene competencia, pues su calidad de material blando reduce el riesgo de que los niños sufran daños si se producen caídas o resbalones, como ocurre con los suelos más duros (gres, cerámica…). Supera a las alternativas naturales como el césped, pues éste exige constantes cuidados y necesita riegos frecuentes en verano, y al césped artificial, cuya instalación es más complicada y su precio mayor que el del caucho reciclado. Conviene aclarar, sin embargo, que para fabricar el relleno del césped artificial se emplea caucho reciclado.
Producto sostenible
Junto a las ventajas mencionadas, hay que destacar su contribución en el ámbito de la sostenibilidad, pues con la recuperación del caucho reciclado para este uso y otras aplicaciones sobre las que se investiga en la actualidad, se evitan los problemas medioambientales derivados de la eliminación, la incineración y el vertido de neumáticos usados.

Desde hace algunos años, el Instituto de Biomecánica de Valencia lidera el proyecto europeo Criosinter, cuyo objetivo es desarrollar un innovador proceso de reciclado de neumáticos que mejore la calidad del caucho resultante, así como abrir nuevas vías de aplicación de este material en sectores como el calzado (suelas) y la industria auxiliar del automóvil (guardabarros, parachoques, alfombrillas…). El equipo del proyecto Criosinter trabaja también sobre la ampliación de usos del material en el sector de los pavimentos, y se han logrado resultados prometedores para su empleo en aceras, revestimientos acústicos, mobiliario urbano y edificios públicos.
Algunas de las conclusiones del proyecto revelan que el consumo energético necesario para fabricar un producto con caucho reciclado se reduce aproximadamente en un 66%, en comparación con su fabricación con caucho virgen. También se aprecian diferencias importantes entre ambos materiales en cuanto a la emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera. Con el empleo de caucho reciclado la emisión de gases contaminantes disminuye en un 47%.