2641610471_0e449c9f7cdef.jpg

En España, durante la época estival, suelen registrarse períodos, de varios días de duración, en los cuales las temperaturas pueden superar los 40 ºC.
El calor excesivo puede alterar las funciones vitales de las personas si su organismo no es capaz de compensar las variaciones de la temperatura corporal.
Los mecanismos que tiene el cuerpo humano para regular su temperatura pueden fracasar y la temperatura muy elevada aumentaría la pérdida de agua y electrolitos necesarios para el normal funcionamiento de los distintos órganos, pudiendo provocar; calambres musculares, deshidratación, insolación y finalmente, golpe de calor, con afectación multiorgánica pudiendo llegar a causar la muerte.

Las consecuencias de este aumento de la temperatura, tienen una especial incidencia en niños, enfermos crónicos y personas mayores. Otro grupo de población sensible a padecer los efectos perjudiciales del calor son las personas que realizan actividades físicas intensas al aire libre , tanto laborales como de ocio.

Los problemas de salud asociados a las altas temperaturas pueden evitarse adoptando unas simples medidas :

Beber frecuentemente agua o líquidos sin esperar a tener sed, evitando las bebidas alcohólicas, las muy azucaradas, el café y el té.
Refrescarse con una ducha, un baño o simplemente mojarse.
Hacer comidas ligeras que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor (Ensaladas, frutas, verduras, zumos ….).

En el exterior protegerse del sol: Buscar la sombra, cubrirse la cabeza, usar ropa ligera y de color claro y un calzado fresco, cómodo y que transpire. Cuidar la piel con protectores solares adecuados y utilizar gafas con filtros ultravioleta.
Reducir las actividades físicas intensas al aire libre durante las horas más calurosas y en su caso extremar las precauciones.
En casa, bajar las persianas cuando el sol incida directamente sobre las ventanas y no abrirlas cuando la temperatura exterior sea alta. Refrescar el ambiente con ventiladores y sistemas de refrigeración, siempre con un uso racional de los mismos.

Todas estas recomendaciones ayudan a evitar y minimizar los efectos nocivos del calor.
Una campaña integral que nos recuerda que: Combatir el calor está en tus manos.