ES POSIBLE CONSEGUIR EL BAÑO SOÑADO. BASTA CON PONER A TRABAJAR LA IMAGINACION Y TENER PODER DE DECISION. DESPUES, HAY QUE SABER COMO GASTARSE EL DINERO.

– Cada baño tiene una solucion particular, ligada a los hábitos de sus usuarios, metros cuadrados disponibles, tipo de vivienda (alquiler, familia, ciudad, campo, etc.), pero también a lo que uno quiere o puede gastar. El punto de partida es siempre un buen proyecto de distribución y el planteamiento de un equipamiento lo más ajustado posible. En reallidad, si la duda es el tamaño, con vistas a futuros cambios, hay otras vías de solución, como, por ejemplo, los equipamientos independientes, formados por piezas sueltas que se van incorporando a medida que se necesitan. En todo caso, lo que no puede faltar en un proyecto de presupuesto cerrado es la implicacion directa de los usuarios en la búsqueda de otras maneras más imaginativas de llegar al mismo resultado.