Ni Halloween, ni La noche de los muertos vivientes, ni nada. Acongojados nos hemos quedado leyendo el blog de Tododucha. Y no sólo porque proponga nuevas expresiones a añadir a nuestro diccionario, como los «adelantes» tecnológicos, sino por el lamentable trasfondo de sus afirmaciones.
Ya me explico. Los «redactores» de Tododucha comienzan diciendo que al cambiar la bañera por un plato de ducha «surgen algunos inconvenientes propios de la poca disponibilidad que hay para este servicio». No será por falta de empresas que se dediquen a ello, sino más bien por la escasez de auténticos profesionales.
Aunque para Tododucha esto no es ningún problema, ya que -cito textualmente de nuevo-, «gracias a los últimos adelantes tecnológicos […] usted podrá realizar este paso sin necesidad DE PROFESIONALES».
¡Está claro! Teniendo a empresas que realizan el cambio de bañera a ducha de cualquier manera, ¿quién necesita a profesionales? Nuevamente, que sea el consumidor quien juzgue y elija.