Ahorrar agua es uno de los objetivos de sostenibilidad más importantes de cara al futuro. En ese sentido, la ducha es uno de los hábitos más ecológicos y más sencillos de adoptar en nuestra vida cotidiana.

Shower Brake es una ducha que nos invita a «echar el freno» al consumo de agua de una manera muy visible. La ducha tiene en la barra central tres mandos de uso intuitivo: uno para regular la temperatura del agua, otro para regular la presión con que deseas ducharte, y el último un temporizador. La idea es, sencillamente, hacernos más conscientes del agua que utilizamos en una sola ducha. Se puede programar el temporizador para los minutos que se deseen, y un tanque con una ventanita en la misma barra de ducha mostrará el agua que se gasta y cómo «baja» el depósito.

Por ejemplo, en 5 minutos se consumen 90 litros de agua. Parece que al saberlo le entran ganas a uno de ser más ahorrador.