Cada vez es más habitual entrar en una casa y que  la estancia más cuidada y decorada sea el cuarto de baño. La ducha ha ganado la batalla a la bañera por accesibilidad, seguridad y espacio.

Hasta hace relativamente poco, una ducha no era más que un plato, una manguera y una alcachofa. Hoy en día las duchas son sistemas integrales, que proporcionan bienestar y confort. Las cabinas de ducha de hidromasaje son auténticos spas en casa. El precio varía considerablemente dependiendo de lo que ofrezcan. El tomar una ducha en una cabina de hidromasaje es un auténtico placer para el cuerpo. Realizan masajes de infinidad de formas dependiendo la zona a tratar, algunas llevan sauna incluida, radio… Nos brindan una sensación de bienestar y nos invitan a decir adiós al estres, por lo menos mientras la disfrutamos.

Os dejamos una imágenes para vuestro deleite y disfrute y… envidia sana quizá?