La ducha no sólo es un espacio de higiene, sino también un lugar para el placer de los sentidos. Ahora que llegan las navidades, podemos regalarnos una ducha sensorial a nosotros mismos.
Esta es nuestra selección favorita de L’Occitane: verbena y limón, aromas cítricos que dan frescor y limpieza a tu cuerpo, dejando un suave aroma limpio y natural en tu piel. Por supuesto, lo primero que necesitas es un plato de ducha antideslizante que te permita entregarte sin miedo al placer de la ducha. Si aún te duchas en la bañera, es el momento de cambiar a plato de ducha en el mismo día y sin obras molestas.
Una vez en la ducha después de un día estresante, puedes relajar tu piel con el Gel Glacial Calmante a la Verbena, un gel que se funde en tu piel con un efecto frescor muy estimulante. Puedes tonificar la circulación sanguínea aplicando el gel con un guante de exfoliación suave.
Para terminar, después de acabar tu ducha enjuagándote con agua de templada a fría y secarte bien todo el cuerpo, puedes aplicarte con suaves masajes la Leche para el cuerpo de Verbena con aceite de pepitas de uva, que te aporta una suave hidratación y deja tu piel con un suave olor a limón.