¡Llega la Navidad! En estas fechas tan entrañables, de estar en familia, compartir momentos con los amigos, la sociedad suele olvidar a sus mayores. Los problemas de la Navidad para los mayores son prácticamente los mismos que para el resto de la sociedad, pero requieren de mayor vigilancia, más atención y ayuda.
Los 3 principales problemas de la Navidad para los mayores son:
1.- Soledad
Es uno de los problemas de la Navidad para los mayores, aunque también es habitual el resto del año. Los mayores suelen vivir en soledad. Pero es en la época navideña, un momento de recogimiento familiar, donde los mayores más pueden sentir la soledad. Muchos mayores han vivido durante años rodeados de hijos y nietos, pero a medida que el tiempo pasa y estos van creciendo es habitual que el número de visitas se reduzca y en la mesa en Nochebuena ya no haya tanta gente.
Acuérdate de tus mayores en estos días. Visita e invita a tus mayores compartir mesa y mantel contigo. Haz que no estén en soledad, que se sientan acompañados y sientan la calidez de estas fechas. Te lo agradecerán.
2.- Frío
Está bien, es un problema que afecta a todos, pero existe un problema muy importante en los sistemas de calefacción empleados. Son tristemente habituales las noticias en invierno de ancianos fallecidos por braseros o incendios por calefactores en mal estado.
Ayúdales a tener el mejor sistema de calefacción en el hogar, el más seguro. Cambia braseros por calefactores eléctricos. Revisa habitualmente los cables, los dispositivos y llama a los técnicos para que pasen por tu casa y pasen inspección de la caldera y los calentadores. y conseguirás reducir el efecto de uno de los principales problemas de la Navidad para los mayores.
3.- Atracones
Aunque es algo cultural, en Navidades todos cometemos excesos, pasarse con la comida podría ser un problema importante. La alimentación es uno de los problemas de la Navidad para los mayores que peores resultados puede traer, ya que muchos padecen enfermedades relacionadas de alguna manera con la alimentación: hipertensión, diabetes, extreñimiento, obesidad u osteoporosis.
Mantén dietas equilibradas y variadas. Divide la ingesta de alimentos en cuatro o más comidas diarias. Cuida la hidratación, modera el consumo de sal y azúcar. Vigila también el consumo de alcohol, no más de uno o dos vasos de vino.