sxc.hu
Al igual que esos estudiosos que se apasionan con su sujeto de estudio, yo no dejo de flipar con la forma de operar de los responsables de Duchamania.
Uno supone que en un negocio basado en la ducha, las empresas deberían jugar limpio. Eso sería lo deseable, y así ha sido hasta ahora.
Sabíamos que somos buenos en lo nuestro, que es cambiar bañeras por platos de ducha en el mismo día y sin obras molestas, con cinco años de garantía y a un precio increíble.
Yo pensaba que eso de los impedimentos a la hora de entrar en la bañera era cosa de personas mayores. Hasta que el otro día, paseando por la calle, me caí de lleno en un socavón traicionero. Esguince en grado 1.
Me llamo Manuel y tengo 76 años.