No se trata de una broma, sino de una criatura acuática avistada en marzo de 1994 en la costa atlántica de Argentina, cerca de las ciudades costeras de Quequén, Necochea y Lobería al sudeste de Buenos Aires.

Llamado así en honor de San José, cuya onomástica el 19 de marzo coincide con el día en que fue avistada la extraña criatura, «Joselito» se dejó ver cerca de la embarcación «Paco Ventura» donde practicaban la pesca Carlos y Fabián Miño. Los pescadores lo describieron como una criatura de color marrón oscuro, casi negro, de unos 10 ó 12 metros de largo, con cabeza pequeña y aplanada como las de los patos y el lomo y cuello dentados como los de los cocodrilos.

Durante los 6 meses siguientes continuaron dándose avistamientos de esta criatura, que los científicos catalogaron como lo más parecido a un plesiosaurio prehistórico. Al igual que Nessie, el monstruo del lago Ness, es difícil demostrar la existencia de «Joselito», pero en cualquier caso ya se ha convertido en un clásico de los mares del sudeste de Argentina.