Por La Prudencia

Hoy voy a hablar de un tema que me pone muy pero que muy nerviosa. Ya saben ustedes que soy un poco crítica con todas estas cosas que inventan y que no necesitamos. Oigan, no me tomen por una de esas que piensan que en el pasado se vivía mejor, no señor.

Mi madre terminaba la pobre derrengaíta de andar todo el día lavando la ropa a mano y fregando platos.  El día que nos casamos Manolo y yo, y nos regalaron la lavadora fue un día para el recuerdo…todavía me emociono al pensarlo. La lavadora duró 17 años, vamos vivió más que el gato. Claro que a Pelusas (el gato persa de Manolito) lo atropelló un coche, una tragedia.

Que me disperso. El caso es que hay inventos que me parecen la mar de prácticos y solucionan la vida, entre ellos Internet. Soy fan, fan de todo lo que ayuda y sirve. Luego hay cachivaches como la ducha pecera esa, que me parezcan una mamarrachada, siento ser tan sincera, pero es la verdad.  Lo que voy a hablar hoy, que me pone muy nerviosa son los grifos estos con sensor. ¿Tan agotador es girar un grifo a la derecha como se ha hecho toda la vida?

El otro día, fui con Amparo a comer a un restaurante de esos fus fus. Ella, después del curso de Internet, se apuntó a uno de “nuvel cusin” o eso le llama ella. Vamos estos platitos que tienen unos nombres larguísimos. Así que como está metida en ese mundo me dijo que fuésemos a tomar al aperitivo a uno de ellos. Para empezar, tenían carta llena de nombres que no entendía, total para ser luego una cosica de nada.

El caso es que voy al baño, que ya me costó encontrar porque no entendía los jeroglíficos que tenían por señales de hombre y mujer. Entro, me lleno las manos de una espuma blanca, que supuestamente era jabón, y cuando busco el asa no hay…Mi cara atónita. Sale una chica y dice que es un “grifo manos libres” que tiene “sensor  de movimiento”, de nuevo mi risilla. La chica sale del baño y !aquello no había manera de que se activase! Insisto, ¿acaso es tan doloroso para los jóvenes levantar un asa? Así que me tuve que quitar la plasta esa pegajosa con un pañuelo. Lo que digo yo, ¡para indignarse!.