Aunque parecen todos iguales, el mundo de los grifos está lleno de posibilidades y opciones, muy variadas y diferentes entre sí. Hay tipos de grifos para todos los gustos y necesidades. Lo importante es saber elegir el tipo de grifo que mejor se amolda a tus necesidades.

En cocina puedes encontrar grifos de caño alto que son ideales para tener más espacio en la pila. Si sueles llenar cacerolas o utensilios altos, este tipo de grifo es lo que buscas. Dentro de la opción del caño, también están los grifos abatibles. El caño puede abatirse y bajar, hasta estar en la posición deseada. Suelen instalarse grifos con caño abatible si el fregadero está cerca de una ventana y no es imposible abrirla sin chocar con el grifo.

Los nuevos tipos de grifos se accionan con detectores de presencia

También están los grifos con mango extensible, seguro que los has visto antes. Son los grifos que permiten ser extraídos. Son una buena idea si no dispones de altura suficiente para un grifo de caño alto. Tienen dos pegas importante, el muelle puede terminar por estropearse y la manguera tiende a picarse si no se usa debidamente.

Lo que diferencia muchos grifos es su mando. Cada vez son más los grifos que funcionan con un único mando, que gestiona tanto la temperatura como el caudal. Otro tipo de grifo es el que funciona mediante dos mandos, pueden ser mandos diferenciados que gestionen ambos el caudal y la temperatura (uno emitiendo agua caliente y el otro agua fría), o ser un mando el que gestiona el caudal, mientras que otro gestiona la temperatura.

Las novedades tecnológicas avanzan y últimamente cuentan con muchos adeptos los grifos que se accionan gracias a sus detectores de presencia. Si el grifo detecta que existe un elemento bajo él se activa. Otra opción, aunque todavía poco habitual en los hogares, son los grifos que se activan por un pedal, más típicos en las cocinas profesionales o laboratorios. Una novedad que está contando con muchos adeptos son el tipo de grifo que incorpora luz, mediante diodos LED.

Y finalmente, lo último del mercado, grifos con dos caños, uno para consumo humano y el otro para lavado, lo que se denomina consumo industrial. Estos grifos son los grifos de osmosis, todavía no son muy habituales, pero han llegado para quedarse.