Cuando nos encontramos con cuartos de baño de reducidas dimensiones, hay que intentar conseguir que la accesibilidad hacia todos los aparatos sanitarios y ducha sea la mejor, aunque a veces es complicado. Vamos a ver un ejemplo real de cómo mejorar la accesibilidad de nuestro baño para tener una idea de los pasos a seguir para conseguir la máxima accesibilidad que nos permite el espacio que tenemos.
El primer paso fue demoler todo el revestimiento de paredes y suelo, eliminando las instalaciones de fontanería y desagües antiguos. En una reforma completa del baño, según los años que tenga, es aconsejable sustituir las instalaciones por unas nuevas, aprovechando que se eliminan todos los revestimientos y así realizar una nueva instalación completa de fontanería, saneo de paredes y nivelado de suelo para los nuevos revestimientos elegidos por el propietario.
Se cambió la bañera por un plato de ducha. No se pudo instalar de pared a pared, hubo que colocarlo algo más pequeño para dejar paso al tubo de desagüe del inodoro. No siempre podemos instalar los platos de ducha a nuestro antojo, ya que nos vemos limitados por otros aparatos sanitarios, normalmente el inodoro que es pieza fundamental en un cuarto de baño. En esta reforma de baño en concreto, para dar acceso a la ducha, se optó por eliminar el bidé que impedía el paso a la zona de baño. No se usaba habitualmente así que decidieron prescindir del bidé para mejorar el acceso.
Se modificaron las tomas de grifería de la ducha, trasladándolas al lateral izquierdo mejorando el acceso al grifo sin que el inodoro nos lo impida. De esta manera, el usuario tiene acceso total a la grifería desde la parte exterior a la ducha tal y como nos solicitaron. Cuando necesitamos duchar a alguien que no puede por sí mismo, es importante tener la grifería a mano, para poder usarla cómodamente. Así se puede poner un taburete en la parte derecha y duchar a la otra persona sin complicaciones.
El mueble que tenía este baño era de grandes dimensiones para el espacio existente, por lo que se sustituyó por un lavabo sencillo más accesible. Recordar que queremos mejorar la accesibilidad de nuestro baño y si por ejemplo vamos a utilizar una silla de ruedas, se necesita que el lavabo no tenga zona de almacenaje debajo para poder arrimar a la persona y que pueda estar cómoda con las piernas bajo el lavabo sin darse golpes.
Cambiamos el radiador antiguo por uno toallero, que al ir más elevado y tener menos profundidad, también ayuda a dar amplitud una vez nos encontramos en el interior del baño. En la anterior posición molestaba a la zona de ducha, además de ser un radiador ya bastante antiguo y deteriorado. De esta manera tenemos el baño caliente a la vez que las toallas.
Como se puede ver en las imágenes, se combinaron dos modelos distintos de azulejo dentro y fuera de la zona de ducha, pero manteniendo el color que gustaba al propietario. Dentro de la ducha piezas lisas que facilitan la limpieza y fuera de la ducha piezas decorativas combinando colores de la misma gama que dan esa frescura al baño. La zona superior pintada en vez de alicatada, fue un gran acierto a la hora de rematar este baño tan coqueto.
Para rematar, aunque no se vea en las fotos, se instaló una mampara corredera de vidrio transparente templado. SecuriBath siempre realiza sus trabajos cumpliendo normativa. De esta manera conseguimos mejorar la accesibilidad de nuestro baño con las limitaciones de espacio que tenemos.
Si tiene un caso similar, un cuarto de baño que no le deja espacios libres y poca accesibilidad, no dude en ponerse en contacto con nosotros y le prepararemos un presupuesto detallado con las mejores opciones disponibles.